Yanin Ruibal en Residencia Corazón/ 29 de Mayo




Al que alimentas

Las emociones son animales salvajes. Nos asechan con ferocidad cuando nuestra voz interior se enfrenta al mundo externo, cuando un conflicto se internaliza y hace de nuestras entrañas su hogar.
Yanin Ruibal es una artista llena de fuego, afligida por la guerra de sus animales internos; manifiesta esa dualidad del bien y el mal de forma visual utilizando las criaturas salvajes que ama, tanto grades como pequeñas.  En Al que Alimentas, Yanin une caballos, cebras, y aves en el violento momento del impacto, en un choque carnal dónde nadie gana ni pierde.  Retratados en la batalla,  estos animales son una representación del “tire y afloje” que los seres humanos experimentamos día a día en el complejo mundo de las interacciones sociales.
Ruibal ofrece una lucha, el conflictos personal que surge por la inherente dualidad de todo ser con pensamientos y emociones. Ninguno de nosotros somos inmunes a la batalla de nuestro interior y muchas veces se puede sentir literalmente como si las bestias nos arrancaran las entrañas.
Al final, esas batallas no tienen importancia en sí, lo importante es lo que hacemos después de que suceden, las decisiones que tomamos en el complejo laberinto de ideas y emociones por el que vagamos: ¿A quién alimentar? ¿Al bueno o al malo?
Las bestias de nuestro interior  pueden estar en guerra perpetua, pero cuando entendemos que así es como debe ser, que es el equilibrio natural de las cosas, podemos canalizar su poder. Quién sabe que tipo de cosas extraordinarias podemos lograr…



The One You Feed
Human emotions are wild animals. They stalk us with ferocity when our inner voice encounters the external world, or when conflict becomes internalised and makes its home in the body.
Yanin Ruibal is an artist full of fire, plagued by the war waged by her own inner animals; the binary between good and evil manifesting itself visually in her love of wild creatures both great and small. In Al queAlimentas / The One You Feed, pairs of horses, birds and zebras are shown at the moment of gory impact, the splash of conflict disrupting flesh; neither animal winning, neither animal losing. Frozen in battle, the creatures enact the daily ‘back and forth’ we all experience when trying to negotiate the complex world of social interactions.
What Ruibal offers is a fight – the internal conflict inherent in the dual nature of what it means to be a thinking, feeling and emotive human being. None of us are immune to the internal struggle and sometimes it can feel as though there literally are beasts waring in our stomachs. The outcome of such battles isn’t important – what is important is how we choose to address ourselves in the complex maze of thoughts and feelings we wander through: which one will you feed, the good or the bad?

Our inner beasts may be at war but when we understand that this is how it should be, that this is nature at its best, we can harness the power of our wild creatures. Who knows what kind of extraordinary things we could accomplish… 

Texto de Marion Piper:  marionepiper.com