Morgan Craig (Filadelfia, USA, 1974) es pintor, docente y Máster de Bellas Arte en Pintura de la Universidad de Filadelfia. Su espíritu viajero lo ha llevado a exponer y participar de residencias en Europa, África y China. “Creo que las estructuras arquitectónicas, que actúan a la vez como depósitos y como vehículos de la memoria, influyen profundamente en la cultura y la identidad al proporcionar un marco tangible a través del cual pueden expresarse facetas de una sociedad. Me he inspirado para crear un corpus que trata de cómo influyen en la identidad los tipos de arquitectura presentes en un paisaje determinado. Mi trabajo no es un mero método de documentación, sino un comentario socioeconómico y sociopolítico sobre los efectos de la arrogancia, la avaricia, el comercio, la externalización, la desregulación, la desterritorialización, el neoliberalismo, la obsolescencia y el capital financiero internacional en comunidades de todo el mundo”
ENG
Morgan Craig (Philadelphia) is a painter, teacher and Master of Fine Arts in Painting at Philadelphia University. His travelling spirit has led him to exhibit and participate in residencies in Europe, Africa and China. "I believe that architectural structures, which act as both repositories and vehicles of memory, profoundly influence culture and identity by providing a tangible framework through which facets of a society can be expressed. Consequently, I have been inspired to create a body of work that addresses how the types of architectural buildings present in a given landscape influence identity. My work is not merely a method of documentation, but a socio-economic and socio-political commentary on the effects of arrogance, greed, free trade, outsourcing, deregulation, deterritorialisation, neoliberalism, obsolescence and international finance capital on communities around the world".
ÍMPETU
Pudiéramos llamar a la obra de un artista contemporáneo, Morgan Craig, que interesado en desentrañar qué misteriosa identidad cultural se oculta tras las estructuras arquitectónicas, depósitos en distintas latitudes: África, Rusia, China, Armenia, Irlanda, Estados Unidos, viaja creando documentos. Así llega expectante a Argentina, La Plata. Este impulso-ímpetus inédito de relevamiento, ha ejercido, a lo largo de su estadía en la Residencia Corazón, una fuerza suficiente para desenterrar el territorio escondido en cercanías: la ex Fábrica de Hielo de la Cervecería Quilmes, sumida a la arrasante vegetación y jauría excrementosa, maloliente y tóxica de las palomas del galpón lindero, con una torre de agua inacabada cual gran pilar. Hacia el lado de la vía del tren Roca, aparecen por un boquete, paisajes laterales, las pasarelas y las fosas desguazadas de maquinarias del ex Aserradero, como una inhumación de la sucesiva secuencia de edificios con basamentos exiguos. En este sentido, llega, impasiblemente, a un espacio que está alejado, a sus espaldas, el Hospital Neuropsiquiátrico Interzonal Melchor Romero, con presencias humanas invisibles, pues no aparecerán en sus obras como es habitual, sino solamente, en el estado existencial que ellas dictan a ese sufriente espacio murario.
Su firmeza insiste y socava el pasado, el esplendor de la Cooperativa Industrial Textil Argentina C.I.T.A. avenida hoy en recuperados talleres de artistas. Allí sus trabajadores guían una visita sin precedentes, con detallado anecdotario que dibuja-desdibuja la desintegración del trabajo, hasta llegar a la sala de máquinas, de hilados, donde Morgan asiente con la mirada: la exhumación del cadáver de hierro, aún vertebrado el esqueleto de carreteles en desuso, des-huso.
Parece que la experiencia en Argentina se congela en Swift, el ex Frigorífico en la orilla de la sórdida calle Nueva York de Berisso.
Con las distintas interpretaciones y especulaciones a que ha dado lugar, comenzar visitando una fábrica de hielo, y terminar con un frigorífico, concluye la gélida metáfora de la actual indiferencia acerca de un espacio colosal abandonado. Morgan finalmente decide pintar su propia interpretación del que, sin duda, es el mejor retrato de la sociedad.
Su investigación se concreta en un lienzo de lino de medidas humanas, sin abismos, y se inicia en una obra de un interior con color, manchas, formas, en la gran tradición del arte occidental, con capas de pintura que puede ser estudiada junto a Simon Edmondson, por sus atmósferas y la destacada factura pictórica. Este artista con sus numerosas obras narra la historia de este singular proyecto, que revisa y proyecta fantasmagóricamente las condiciones de trabajo: "la arrogancia, la avaricia, el libre comercio, la subcontratación, la desregulación, la desterritorialización, el neoliberalismo, la obsolescencia y el capital financiero internacional, en las comunidades de todo el mundo" -ahora también revelado en Argentina - tal lo enuncia en su texto: ÍMPETU.
*IMPETU: impulso, fuerza dirigida a, embestida, ataque.
In: hacia el interior, a veces también en contra.
petere: dirigirse a, buscar, pedir.