“Flow”, my first solo
exhibition, is a collection of works best representing the body of research and
experimentation with media that has shaped my residency for the past month here
in La Plata. My work is largely influenced by topographical images and biological
systems; through fluid-like organic forms, I am illustrating the connection
cellular structures and geological formations maintain with one another. Cells,
for example, that are infected with disease, must grow in alternative ways to
heal just as geographical structures, when faced with human or natural
interruptions, are forced to change shape, rethink, and rewire themselves.
“It is when we act freely, for the sake of the action itself rather than
ulterior motives, that we learn to become more than what we are.” Mihaly
Csikszentmihayli[1]
‘Flow’ is the best way I can capture my artistic
practice – visually, as the materials react with each other, and mentally, as I
enter flow state as a pivotal phase of my artmaking process. Each painting
begins with one continuous line and color: the rest I leave up to chance.
Intuitively working allows me to observe the relationships separate colors
create with their surroundings; I am able to make decisions based on the
adaptability of colors to their environment. This results in a delicate balance
of line, color and form that is equally weighted throughout the composition. I
act more as a facilitator for the process of “flow”; by ignoring external
stimuli and entering a hyper-focused level of consciousness that enables me to
let go of expectations and embrace the unpredictable.
I am excited to share this journey with you. I hope
you, too, will try to immerse yourself in the ‘flow’.
[1] Csikszentmihalyi is best
known for his theory of flow, which he outlined in his seminal 1990
book Flow: The Psychology of Optimal Experience. According to
Csikszentmihalyi, people are happy when they are in a state of flow,
a type of intrinsic motivation that involves being fully focused on
the situation or task. He describes flow as "being completely involved in
an activity for its own sake. The ego falls away. Time flies. Every action,
movement, and thought follows inevitably from the previous one, like playing
jazz. Your whole being is involved, and you're using your skills to the
utmost.” (www.verywellmind.com/mihaly-csikszentmihalyi-biography-2795517)
"Flow" [Fluir], mi
primera exposición individual, es una colección de obras que representan mejor
el cuerpo de investigación y experimentación con materiales que ha dado forma a
la residencia durante el último mes aquí, en La Plata. Mi trabajo está
influenciado en gran medida por las imágenes topográficas y los sistemas
biológicos; a través de formas orgánicas fluidas, estoy ilustrando la conexión
que las estructuras celulares y las formaciones geológicas mantienen entre sí.
Las células que están infectadas con enfermedades, por ejemplo, deben crecer de
formas alternativas para sanar, al igual que las estructuras geográficas cuando
se enfrentan a interrupciones humanas o naturales, se ven forzadas a cambiar de
forma, replantearse y cambiar de estado.
"Es
cuando actuamos libremente, por el bien de la acción en sí y no por motivos
ocultos, que aprendemos a ser más de lo que somos." Mihaly
Csikszentmihayli [1]
“Flow”
es la mejor manera de capturar mi práctica artística, tanto visual -cuando los
materiales reaccionan entre sí-, como mentalmente -cuando entro en el estado de
flujo como una fase fundamental de mi proceso creativo-.
Cada
pintura comienza con una línea continua y un color: el resto lo dejo al azar.
El trabajo intuitivo me permite observar las relaciones que los colores
separados crean con su entorno; soy capaz de tomar decisiones basadas en la
adaptabilidad de los colores. Esto resulta en un delicado equilibrio de línea,
color y forma que es igualmente ponderado en toda la composición. Actúo más bien
como una facilitadora del proceso de "flujo"; ignorando los estímulos
externos y entrando en un nivel de conciencia híper focalizada que me permite
dejar de lado las expectativas y abrazar lo impredecible.
Estoy
emocionada por compartir este viaje con ustedes. Espero que ustedes también
intenten sumergirse en este "fluir".
[1] Csikszentmihalyi es más
conocido por su teoría del flujo, que esbozó en su libro de 1990 Flow: The Psychology of Optimal Experience.
Según Csikszentmihalyi, las personas
se sienten felices cuando están en un estado de flujo, un tipo de motivación
intrínseca que implica estar totalmente concentradas en la situación o tarea.
Describe el flujo como "estar completamente involucrado en una actividad
por su propio bien". El ego se desvanece. El tiempo vuela. Cada acción,
movimiento y pensamiento sigue inevitablemente al anterior, como tocar jazz.
Todo tu ser está involucrado, y estás usando tus habilidades al máximo"
(www.verywellmind.com/mihaly-csikszentmihalyi-biography-2795517)
La serie de
obras que Hallie Schmidt presenta como parte de su estadía en Residencia
Corazón, son una invitación a percibir este estado de impermanencia que es
característico de lo viviente.
Tanto como
si se tratara de la observación microscópica de sistemas biológicos, celulares,
neuronales o satelital, de topografías, formaciones geológicas, marítimas o
fluviales, sistemas ecológicos, las obras de Hallie parecen hacer visibles las
formas, estructuras y procesos que suceden en la materia a escalas no observables
para el ojo humano.
Cada obra es
un sistema complejo diferente, pero la acción que Hallie imprime en los gestos,
imita los sistemas biológicos: cierta recurrencia de movimientos y procesos.
Aunque un acontecimiento, en sí mismo, sea diferente de otro, siempre hay una
constante que los reúne; percibirla, es aquello a lo que Hallie nos está
invitando.
En las obras
de Hallie existe un alto grado de impredictibilidad. A manera de tejido, las
formas se van conectando unas con otras, dialogando entre sí, formando un
sistema orgánico a partir de la experimentación con las reacciones y las
interacciones de los materiales. Así la
obra se presenta como proceso, como una estructura abierta al error.
Entonces,
¿qué potencia se agita en lo impredecible? ¿Qué potencia para devenir otra
forma habita en la incertidumbre? ¿Por qué persiste una necesidad de controlar,
de dominar cuando más bien hay imprecisión, ausencia de certeza?
“Flow”
(Fluir) es una incitación al movimiento. Una invitación a la necesidad de desprogramar
las lógicas deterministas de lo dado. A explorar las formas de lo posible. A
explorar la potencia de lo indeterminado. A devenir proceso. A confiar en lo
impredecible.
Catalina Poggio/ Curadora- Curator